Cuestiones ortodónticas

O preguntas que se hace la gente sobre brackets, frenos, aparatos...



Vamos a imaginar una entrevista, de las muchas que tengo con mis pacientes antes y/o durante el tratamiento de ortodoncia, para así citar una serie de preguntas que se repiten mucho en la gente sobre los estos tratamientos que en la calle se llaman comúnmente "aparatos" y en la riquísima América "frenos" o "brackets".



Del mismo modo muestro, para amenizar la lectura, algunos de mis casos resueltos últimamente y que responden mucho mejor que yo a la pregunta de por qué la gente se pone aparato.



Pregunta: ¿No hay otra manera de poner rectos los dientes?

Respuesta: NO. Si hubiese otra forma, por rara o sorprendente que fuera (imaginemos que soplando globos se alineasen los dientes), los dentistas entonces no pondríamos aparatos (enseñaríamos a inflar globos y cobraríamos por ello).
Los métodos de la llamada ortodoncia invisible no son tales sino que suelen esconder métodos de brackets transparentes/blancos, aparatos por dentro (ortodoncia lingual) u ortodoncia mediante férulas transparentes, que no invisibles. Todo al fin y al cabo es lo mismo, lo que llamamos en general aparatos y que es la Ortodoncia, ciencia que recoje la manera de mover y recolocar de manera correcta los dientes y los maxilares dentro de la cara.



Pregunta: ¿Cuanto tarda un tratamiento?

Respuesta: El 50% de mis tratamientos concluyen en 18-24 meses. Para que ésto sea así, lógicamente hay un 25% de pacientes que acaban antes del año y medio y otro tanto que sobrepasa los dos años de tratamiento, pero ambos extremos de la cola son advertidos antes de comenzar el tratamiento de cuánto tiempo aproximado se va a tardar.
Éste es el tiempo de tratamiento activo, en el que el/la paciente porta el aparato que ha de ser revisado mensualmente más o menos, pero el tratamiento completo de ortodoncia tiene una parte ulterior, el mantenimiento, que es cuando ya retiramos la aparatología activa y que suele oscilar entre el año y medio y los dos años para asegurarnos de fijar la posición obtenida durante la fase activa de tratamiento.
Traducido al cristiano: que aunque estés menos de dos años con aparato, para asegurarnos de que lo que hemos conseguido perdura has de estar al menos otros dos años visitando regularmente a tu ortodoncista para que se asegure de que lo obtenido será permanente.



Pregunta: ¿Es doloroso?

Respuesta: Yo diría que no es doloroso pero sí molesto. Quiero decir que si durante cualquier momento del tratamiento el/la paciente sufre algún dolor habrá de consultarlo con su ortodoncista porque ésto no es normal y requiere tratamiento.
Lo que sí es normal es que al llevar aparato, alambres, brackets, frenos, gomas, ligaduras, cadenetas, muelles o coil springs... etc al paciente no le sea cómodo ni al hablar, comer, beber o realizar cualquier actividad cotidiana, pero acabará acostumbrándose y se le darán las medidas oportunas para que estas molestias no se conviertan en problemas de dolor.



Pregunta: ¿Por qué hay que sacar dientes, a veces?

Respuesta: Es muy sencillo. El espacio que tienes en la boca para que tus dientes quepan es finito, delimitado. Podemos "estirarlo" un poquito, pero si te hace falta mucho espacio para ponerlos todos rectitos no nos queda más remedio que quitar dientes para aprovechar ese hueco que dejan para conseguir alinear correctamente el resto de los dientes en la boca. Lo bueno es que al final del tratamiento no quedan huecos, por lo que no parece que te hayan quitado ningunos dientes.


Pregunta: ¿Cuál es el mejor momento para ponerse aparato?

Respuesta: Hoy en día lo más importante es que el paciente quiera llevar aparato, no cuándo lo quiera llevar. Es decir, que ponemos aparato en niños de seis años si el caso es lo suficientemente grave como para justificarlo y el paciente lo entiende, y en mayores de sesenta años para alinear los dientes correctamente antes de reponer piezas ausentes, por ejemplo.
Lo que no hacemos bajo ningún concepto y no se lo recomiendo a ningún profesional es colocar un aparato a un paciente que no quiere llevarlo. En éstos casos lo mejor es hablar con el paciente y su familia, y cuando éste esté convencido empezar, pero no antes. Gracias a Dios, en la resolución de los problemas dentales no es tan importante el cuándo como el cómo.


Por último, aunque nunca me lo preguntan siempre digo lo mismo. Lo más importante a la hora de ponerse en manos de un/a ortodoncista para ponerse aparato es la confianza. Es básico que cualquier pregunta cómo esta u otra cualquiera se la hagas a quien te está tratando porque en realidad váis en el mismo barco aunque sea el paciente quien porte el aparato literalmente, el/la ortodoncista está contigo para llegar a vuestro objetivo común: conseguir una sonrisa de película.


Un saludo cordial.



Alejandro Cárdenas Martos
Roquetas de Mar, 21 de octubre de 2008.